Enviado por la mosca roja en Mar, 24/01/2012 - 13:44
“Escribo para no reventar, por temor a la muerte lenta y a la gangrena de la amnesia, en la que se pudre toda una generación (…) Escribo mientras noto cómo me sube por dentro la bomba de explosión retardada de estos años de soledad (…) Escribo porque todavía no se me ha ocurrido nada mejor para matar definitivamente las mañanas carcelarias. O porque no he tenido el valor para hacerlo. Escribo para que esas mañanas sin vida se encarcelen y se hundan en el dolor de las palabras y de su frágil arquitectura.”