De cara a explicar cómo se insertan los Sujetos Revolucionarios en las Organizaciones Revolucionarias, os incluyo la reflexión de Pepita Verdejo, alias Comandante Sapofrita.
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Te resumo el discurso de las organizaciones, revolucionarias o no, con respecto al Sujeto Revolucionario:
 
 "Compañeros, sigamos aportando dinero e inutilidades varias para el desarrollo de la simple vida sin más (alimento, cobijo, higiene, educación...). Contribuyamos aún más a la confusión y al sentimiento de inferioridad del individuo para que siga creyendo que somos imprescindibles y que sin su integración incondicional en la organización será incapaz de auto-abastecerse o progresar en lo más básico. No nos quedaremos tampoco sin perder todo el tiempo, recursos, medios y energía necesarios en celebraciones y/u onomásticas inútiles varias y en reclamaciones estériles sobre posesiones actuales o del pasado (ya sean teóricas, culturales o materiales) que no suponen más que un lastre a la hora de avanzar. Mientras tanto, no deje de pasar por caja a abonar sus cuoticas, que su labor como contribuyente es fundamental y sin ella nunca alcanzaremos la zanahoria que exhibimos como cebo".
 
Mi sensación respecto a la revolución viene a ser que desde el origen de la civilización se la utiliza para adaptarla a los intereses de unos pocos y se transforma la causa original, hasta hacer de ella un nuevo instrumento de dominio.
 
Por lo que vivo del día a día, el trabajador común (Sujeto Revolucionario) podría formar parte ahora de un documental sobre homínidos primitivos privados del más mínimo sentido de la realidad subjetiva y convertido en un ser incapaz de desarrollarse en lo más básico. Incapacitados para pensar y actuar por sí mismos. Dependientes y pendientes de lo que imponga el dios o el funcionario o el líder o la bolsa de valores o la televisión…
 
Me da la sensación de que se complica demasiado la cosa con teorías complejísimas y que mientras haya un solo semejante privado de lo más básico para su desarrollo, queda en un plano secundario tanta relatividad y visión profética.
 
Ná que al final lo malo que va a tener el sujeto revolucionario ese, es precisamente eso, que está sujeto, comprimido más bien.
 
Te dejo. Entre los niños que están especialmente pesados y no sé si será por un exceso de lejía y estropajo verde, pero las yemas de los dedos las tengo que haber modificao porque están como quemadas y no puedo escribir más. Lo que es de uno es de todos, lo que es de todos es de nadie, lo que es de nadie es de uno.