Estúpidos adultos: la obra es buena. Los malos son los otros

Una de las cosas más curiosas que estoy leyendo en torno a la obra de Títeres desde Abajo, es que dicen puede que sea de mal gusto, o que sea exagerada o mala o inapropiada. A ver, dos cosas. En primer lugar, y lo digo yo que soy un experto: la obra es muy buena, dirigida a adultos, la pueden ver los niños tranquilamente. Llevo más de cincuenta años acompañando niños al cine, los domingos a los títeres, o a los payasos, o a lo que sea. Me gasto una pasta en espectáculos infantiles con artistas callejeros desde los sesenta… Chitty chitty bang bang, el Pato Saturnino, las Marionetas de Herta Frankel, los Chiripitifláuticos… No tenéis ni puta idea de lo que le gusta a los niños, estúpidos adultos. En segundo lugar, no se ha metido a dos titiriteros en la cárcel porque la obra sea mala. Si por pésimo gusto se llevase a los artistas a la Audiencia Nacional, dios, hay más de uno reconocido que estaría diseñando interiores en el Módulo de Respeto. A los artistas de Títeres desde Abajo  los encarcelan por apología del terrorismo, no por ser malos actores. 

En mi opinión. Todo comentario que mencione la mala calidad de la obra como explicación de lo que ha venido después, es agachar la cabeza, hacer concesiones, bajarse los pantalones ante el fascismo sociológico que nos rodea, creado pacientemente por los sucesivos gobernantes democráticos. En lugar de esforzarse  los demócratas en defender el Estado de Derecho cumpliendo con las reglas de su propio juego, las incumplieron empleando terrorismo de Estado, torturas, montajes policiales y ampliación del círculo terrorista (si les conviene), de manera que a día de hoy cualquiera puede serlo con emplear la palabra "gora", que como sabemos, enaltece al terrorismo. ¡gora goragoragora gooooora! Lo del terrorismo de Estado y las torturas no lo digo yo, ni los torturados y asesinados. Los propios tribunales españoles llevaron al banquillo a políticos, ministros, policías y guardias civiles acusados de montar el GAL. Organismos internacionales y asociaciones de Derechos Humanos han manifestado una y otra vez las carencias del Estado Español en materia de garantías de la integridad de los detenidos. 

Dicho esto, el juez de la Audiencia Nacional ha llevado a la cárcel a dos artistas, que por lo que leo, le han explicado con paciencia y buena voluntad que su intención no era enaltecer al terrorismo, y está visto que mejor cerrar el pico y subir al patíbulo en silencio negándolo todo. Al juez le cuentan de buen rollo que la pancarta lo que denuncia es un montaje policial, pues en la obra un policía coloca ese cartel a una mujer inconsciente para llevarla a juicio. Y el juez, interpreta, y llega a la conclusión de que la pancarta no solo enaltece a ETA, si no también a AlQaeda (1). Es decir, que o bien el juez padece alguna carencia enzimática, o bien prevarica.

Así que yo pienso, que algún sindicato de artistas, o de comediantes, o de trabajadores, alguna entidad colectiva, debería ejercer su derecho a denunciar al juez por prevaricar con ganas, y que lo inhabiliten como vergüenza de la profesión de letrado. Deberían además buscar los términos de la denuncia, quién la efectúa, y al que haya sido el de la idea de "enaltecimiento del terrorismo", ya sea policía municipal, concejal o padre indignado, meterle una pedazo de querella por denuncia falsa. Porque alguien tiene que pararles los pies a estos señores de horca y cuchillo, acostumbrados a hacer de sus neuras ley.

Malos tiempos estos, y lo que está por venir. Títeres desde Abajo, la obra es muy buena. Lo que es de uno es de todos, lo que es de todos es de nadie, lo que es de nadie es de uno.

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NOTAS

(1) Dice el juez: "…Pues tal hecho, supone enaltecer o justificar, públicamente los delitos terroristas cometidos no sólo por la Organización Terrorista ETA, sino también por AL-QAEDA, pues los propios investigados han manifestado en sus declaraciones judiciales que la expresión Alka es un “juego de palabras”, referido a la Organización terrorista antes citada, por lo que la traducción del contenido de la pancarta o cartel exhibidos viene a significar ”VIVA AL-QAEDA-ETA”, o de quienes han participado en la ejecución de actos terroristas, conductas éstas tipificadas en el artículo 578 del Código Penal vigente".

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