Rajoy en Fukushima

Emulando a Fraga bañándose en Palomares, cuando lo de las bombas atómicas de los gringos, Rajoy visita Fukushima. El pueblo japonés puede respirar tranquilo. Rajoy ha soltado un discurso, en el que ha manifestado que los temores de los occidentales que vinculan el nombre de Fukushima con el desastre nuclear, son infundados, y allí está él para demostrarlo, invulnerable como Aquiles, inaugurando la exposición "Flores de Invierno". Es un tipo culto.

El hombre no pierde la compostura, y suelta a micrófono abierto, a una atribulada japonesa, que él sabe mucho de estigmas, porque "en España somos expertos. Te cuelgan una etiqueta y luego no hay quien se la quite". Como las manchas esas de grasa, que ni los detergentes más conspicuos las disuelven,  España, país cutre. Eso, durará siglos, tal vez sobreviva España a la muerte térmica del Universo, protegida por la costra. 

La central nuclear de TEPCO, hecha fosfatina por el tsunami en marzo de 2011, no ha dejado de ser noticia desde entonces. Pasadas las explosiones de los primeros días, las fugas del agua radiactiva empleada para enfriar el reactor, han sido permanentes. En realidad no son fugas, si no que desaguan las piscinas a la mar serena ya que no hay dónde meter semejante muermo. 400 toneladas diarias. Así que al océano, con los pececitos,  a colectivizar las radiaciones. Godzilla nació en Japón.

¿Cuánto ha costado el tema? 30.000 millones de euros dicen que ha soltado el gobierno japonés a TEPCO para gestionar el desastre. Aparte hay que contar los cierres de cientos de empresas, bajada del valor de inmuebles, empleos perdidos, personas muertas, gastos sanitarios por cánceres, 170.000 evacuados, animales mutantes y todo lo que se os ocurra. 

El tío Rajoy terminó su discurso, ante semejante panorama, haciendo un canto a la confianza, a no ser pesimistas, a ver el futuro con optimismo, a trabajar duro, a firmar contratos, y que cualquier problema, cualquiera, lo podemos resolver. ¿Que hay seismos en Castellón con el Proyecto Castor? (1) No hay que inmutarse, todo va a salir bien.

Rajoy, primer presidente "occidental" en visitar Fukushima. ¿Cómo ha tenido valor para ello? ¿Hizo la mili en la Legión? Bueno, es que la zona de exclusión radiactiva es de treinta kilómetros en torno a la destruida central, y él se ha quedado a sesenta con las autoridades. Por si acaso.

¡Tokio Electric Power! ¡Desastre colectivo! ¡Beneficio empresarial! Lo que es de uno es de todos, lo que es de todos es de nadie, lo que es de nadie es de uno.

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NOTA

(1) http://www.abc.es/local-comunidad-valenciana/20131003/abci-terremotos-castellon-garraf-201310030843.html

Veremos a ver si no abren un bujero en el Mediterráneo, y se va pal centro la Tierra. Hay un cenizo flotando...